Tal vez morir en pedazos era mejor,
Pequeños trozos de vida quedarían…
En el desierto.
Mientras otros llorarían desenvueltos.
Algunos los llamaron valientes,
A otros suicidas
Y a otros simplemente cobardes.
Valiente quien iba a enfrentar,
Suicida quien iba por una dura muerte,
Y cobarde el que escapa a lo que considera
Un mejor infierno.
Pero los valientes eran otros…
Quienes quedaron en casa esperando,
Colgaron su letrero en casa:
Vuelve-a-casa.
Sentados esperando
Por sus hombres armados.
Valientes los que nunca perdieron esperanzas,
Porque ese era el peor vicio.
¡Fascinante!
ResponderEliminarEl vicio de la esperanza...